martes, 21 de mayo de 2013

01.72 Puy D’Ull-Zangoza

Desde el libro "De aldeas a ciudades, de J.Armendariz)


Poblado del Hierro Antiguo-Final, habitado también durante el Periodo Romano y Medieval, situado en el actual término municipal de Zangoza y a 2,5 km. de distancia en la carretera a Xabier. A una altitud de 490 m. y con una superficie de 4.000 m2, los poblados mas cercanos eran Filera a 2,6 km. y El Castellón a 3,1.


En sus inmediaciones nace el barranco de Puydull.
(Sobre Ull y Fillera de David Romano)








Historia del yacimiento y bibliografía
Inédito como poblado de la Edad del Hierro. La histórica población medieval de Ull, con una antigüedad comprobada documentalmente desde el siglo XI dejando de figurar en los censos de población del siglo XIV, fue dada a conocer por Juan Cruz Labeaga en su trabajo monográfico sobre la arqueología sangüesina (Labeaga, 1987:46-49).

En este yacimiento Labeaga diferenció claramente dos áreas, por un lado la cumbre de este prominente cerro testigo exento y amesetado -conocido popularmente entre los lugareños como "Cantera Redonda"- estaría ocupada por el desolado medieval, que arroja abundante material cerámico de la época medieval mientras que, por otro lado, en la parte baja de su ladera suroriental situó una villa romana cuyos materiales la ubican cronológicamente en los primeros siglos de nuestraEra.

Nuestra prospección del lugar, cuyo cerro emerge bruscamente en una amplia terraza pleistocénica del sistema Aragón/Onsella, traslada la primera ocupación del cerro al primer milenio a.C., ya que la localización de materiales de la Edad del Hierro en el yacimiento así lo atestigua.


Sistema defensivo
La estructuración protohistórica del cerro queda parcialmente eclipsada por la población medieval que ocupa su cima, que la organiza en dos unidades netamente diferenciadas del sector meridional. donde se levanta la torre de un castillo en un pequeño recinto aislado del resto por un foso transversal, y el sector septentrional, donde se localiza el caserío de esta aldea.

Sin embargo, todas las laderas del cerro están recorridas por bancales parcialmente conservados que si podrían tener un origen en la Edad del Hierro, pues diseñan una ordenación del acceso de recorrido único, helicoidal, y en sentido a las agujas del reloj, alcanzando la cumbre por su flanco oriental. No nos cabe ninguna duda que este mismo camino fue el que habría utilizado la comunidad medieval de Ull que lo pobló, beneficiándose de una vieja infraestructura viaria protohistórica.


Cultura material
A los materiales romanos y medievales ya publicados por Labeaga en su meritorio trabajo añadimos el hallazgo de pequeños fragmentos cerámicos de la Edad del Hierro, tanto con pastas modeladas a mano (de imposible clasificación formal) como de otros realizados a torno que podrían ser celtibéricos.


Valoración
La rebusca de pruebas arqueológicas en el histórico sitio de Ull confirma la sospecha que teníamos hace años de que este emergente cerro testigo, a la vista de los castros de el Castellar de Javier y El Castellón de Sangüesa, podría haber albergado a una población estable durante la Edad del Hierro que se acomodó defensivamente en su cimbre amesetada.

La falta de datos estratigráficos en este yacimiento así como la superposición de la aldea medieval sobre el horizonte protohistórico de momento impide evaluarlo en su justa medida. Lo que parece bien cierto es que para la época de Augusto su población abandonó las alturas en los nuevos tiempos de paz para asentarse en la parte baja del cerro, al abrigo de los vientos dominantes del norte y junto a los fértiles suelos de naturaleza aluvial. Aquí debió estar asentada la población, a nuestro juicio constituyendo un vicus mas que una villa rústica como propone Labeaga, que sin duda habría dependido de la importantísima ciudad de Filera durante los cuatro primeros siglos de nuestra Era a tenor de los hallazgos de Labeaga y de otros por nosotros realizados.

Muy posiblemente a partir de esa fecha (siglos V y VI d.C:) la población que saldrá del anonimato en los siglos pleno medievales se habría vuelto a encastrar en la seguridad que ofrecía la cima del "puyo". en un claro ejemplo de incastillamiento para una época de desestructuración política e inestabilidad social. Un pequeño castillo aislado por foso en su extremo meridional habría protegido el caserío de esta pequeña aldea hasta el siglo XIV, cuyos habitantes habrían visto pasar a los peregrinos por el Camino de Santiago (tramo jaqués) que discurre junto a Puy D'Ull,


Estado de conservación
El yacimiento se encuentra inculto, por lo que no presenta mayores pérdidas patrimoniales que las derivadas de la erosión natural, a excepción de su área romana, ocupada en la actualidad por fincas agrícolas con cultivos cerealísticos.